FSC-CCOO Ferroviario | 5 mayo 2024.

Adiós a Manuel Fernández Aller

  • Fallece el compañero Manuel Fernández Aller, histórico sindicalista que fue secretario general del sindicato ferroviario de CCOO en los años 80/90

11/10/2023.
Francisco Naranjo junto a Marcelino Camacho y Manuel Fernández Aller, en el III Congreso del Sindicato Ferroviario en Cádiz . Abril de 1984

Francisco Naranjo junto a Marcelino Camacho y Manuel Fernández Aller, en el III Congreso del Sindicato Ferroviario en Cádiz . Abril de 1984

El sector ferroviario de CCOO lamenta el fallecimiento de Manuel Fernández Aller, histórico sindicalista que fue secretario general del sindicato ferroviario de CCOO en los años 80/90, y se suma a las palabras de Paco Naranjo, Director de la Fundación Abogados de Atocha y sindicalista de CCOO:

Ayer me informaba Pepa Páez, la actual secretaria general del sector ferroviario de CCOO, que había fallecido Manuel Fernandez Aller, compañero que fue secretario general del sindicato ferroviario de CCOO en los años 80/90 del siglo pasado y aunque éramos conscientes de su ya larga enfermedad, sentí un golpe duro y se me agolparon los recuerdos en mi mente, además de alguna furtiva lagrima en mis ojos.

Cuando recibí la noticia tenia a mi lado a mi compañera Isabel y cuando se lo dije, ella comento: se van muriendo los históricos, “los históricos mejores”, maticé yo, pues en muy poco periodo de tiempo se nos han ido Manolo Cachán, Miguel Zurdo, y Domingo Bartolomé, que con José Luis Martino, Manolo Navarro, Vicente Muñoz Frías, Benito Barrera, también fallecidos hace algo más de tiempo, eran -con alguno más- la columna vertebral del sector ferroviario de CCOO, en las últimas décadas del siglo pasado.

Quiero escribir algo de él y sobre él y que mejor que recordar algunas vivencias compartidas en mi etapa sindical ferroviaria (1975/1988). 

Conocí a Manolo Fernández Aller, en 1975, pocos meses después de las ultimas elecciones sindicales del vertical, donde al igual que yo había sido elegido enlace sindical en las oficinas de Paseo del Rey, en el entorno de Príncipe Pío. Él, encabezada cualquier reivindicación – movilización, que se realizara entre el personal de oficina en el conjunto de Madrid. Era un líder nato. Su carácter cercano y tranquilo, sumamente preparado en lo laboral, su categoría era de “Experto Laboral”, (titulación de Graduado Social), hacía muy creíble sus palabras y se tenía una gran confianza en él.

La relación con él y con otros compañeros ferroviarios de Madrid: Manolo Cachan, Gregorio Marcos, Domingo Bartolomé, Leandro Esteban, Santiago Rueda… se debía a que en aquellos momentos éramos, -eran- los que se estaban moviendo en Madrid para articular el Pleno de Representantes Ferroviarios, organismo unitario al margen del sindicalismo verticalista, organismo unitario que consiguió la firma del primer Colectivo en RENFE a finales de 1976.

Durante muchos años mantuvimos una excelente amistad, en lo personal, en lo sindical y en lo político, pues como he comentado era de las personas que se dejaban querer. En lo sindical, a pesar de que todos queríamos estar negociando y revindicando en Renfe, él no tuvo problemas de ningún tipo el ser la persona designada por la Ejecutiva del SF de CCOO, para estar con los compañeros de contratas ferroviarias ayudándoles a conseguir sus primeros convenios colectivos. Un ejemplo que pocos seguían por aquel tiempo.

Después, ya en abril del año 1981, en el 2º Congreso del Sindicato Ferroviario, fue elegido secretario general, por la práctica unanimidad de los 280 delegados y delegadas que asistieron al congreso en representación de sus 25.000 afiliados y afiliadas que tenía el sector. En los siguientes congresos fue reelegido hasta los primeros años de la década de los 90, que ya decidió no presentarse a la reelección en el 5º Congreso, celebrado en junio de 1992. A pesar de ello continuó ligado al sindicato hasta ya entrado el año 2000, representado a CCOO en el Consejo de Administración de RENFE, entre otras tareas sindicales. 

Yo estuve codo a codo con Manolo, como decía antes, tanto en el Pleno de Representantes, como en el Comité Intercentros de RENFE, así como de responsable de Comunicación en el sindicato hasta que pasé a la Unión Regional de CCOO de Madrid en 1987 y en esos mas de 13 años son muchas las anécdotas, buenas y malas, que pasamos juntos.

Solo destacar algunas de ellas: Cuando a comienzos de enero de 1976 nos militarizaron en RENFE, el día que daba comienzo la militarización yo había estado trabajando de noche en la estación de ffcc de Peñuelas y habíamos quedado un pequeño grupo en Paseo del Prado, frente a la sede del actual Ministerio de Sanidad, entonces sede del Ministerio de Relaciones Sindicales. Como eran las 10 de la mañana no había llegado casi nadie, llame a través de una cabina a la oficina donde trabajaba Manolo y este en cuanto me cogió el teléfono me mando urgente para casa, notificándome la decisión ministerial de militarizarnos, no solo a nosotros si no también a los compañeros del Metro. Hasta un par de meses después no podíamos ni abrir la boca. 

Otra fecha señalada de mis recuerdos con Manolo, fue el 23F, (23/2/1981), fecha aciaga que se produjo el golpe de estado en el Congreso de los Diputados por parte de Tejero y su gente. Yo por entonces vivía en Alcorcón, pero después de lo que había pasado aquella tarde, tanto mi familia como yo, aún no habíamos salido de Madrid. Estábamos en la casa de otro compañero: Santiago Rueda y a ella llamo Manolo, sobre las 10 de la noche, para comentarnos que teníamos que acercarnos solidariamente a apoyar a los diputados secuestrados (aquí la historia de aquel nefasto 23F). Manolo como siempre al pie del cañón, esa noche y al día siguiente 24F, presentándole a la Empresa una propuesta urgente de paro de 5 minutos a las 12,00 h del medio día en defensa de la democracia. 

En aquellas épocas de los 80/90 convocábamos bastantes huelgas en el ferrocarril para conseguir reivindicaciones y derechos para los ferroviarios y otras muchas para que no nos los quitaran. En una de ellas, estando de piquetes en la estación del Norte. Me acuerdo como si fuera ahora, Manolo y yo, nos fuimos a dar una vuelta por las vías para ver como iban los paros programados y si se estaban cumpliendo los servicios esenciales y tal. 

A la vuelta a la sede del Comité Intercentros (Por entonces estaba en Príncipe Pío), nos dicen que subiéramos, que la Dirección de RENFE quería hablar con la Comisión Negociadora, así que a prisa y corriendo, tuvimos que lavarnos bien las manos sucias de actuar de “piquetero-informante” para ir bien limpitos a la reunión. El único problema, fue que Manolo tuvo que ir en mangas de camisa en pleno invierno, porque la chaqueta se había manchado de transitar por las vías, en especial al pasar por debajo de los topes de algún vagón. De nuevo Manolo supo estar al pie de las vías y no solo en las oficinas. 

En fin, podría seguir escribiendo muchas mas cosas, pero para dar unas pinceladas sobre el gran sindicalista y mejor persona que fue Manuel Fernandez Aller, creo que es suficiente. Para terminar, solo reiterar mis condolencias a su familia, en especial a su compañera Cuqui y sus hijos y que DEP cámara, compañero y amigo Manolo, que aquí en la tierra siempre te recordaremos, pues como dice Alberto Cortez en la primera estrofa de su canción… 

Cuando un amigo se va

Queda un espacio vacío

Que no lo puede llenar

La llegada de otro amigo

(Canción de “Cuando un amigo se va” de Alberto Cortez)